Para los yucatecos encontrar es buscar, todos conocemos la famosa frase de "lo busco, lo busco y no lo busco".
Normalmente buscamos después de haber perdido algo. Mi abuela que sufría constantemente pequeñas pérdidas materiales, amarraba un anillo en un pañuelo y con intenso fervor decía en voz alta: San Cucufato, si no lo apareces, no te desato.
En realidad sólo hay dos maneras de encontrar algo: después de una larga y paciente búsqueda o de pronto, sorpresivamente, como esperando lo inesperado.
La clave de encontrar es saber lo que se busca. Así que sólo podemos buscar lo que ya conocemos, lo que alguna vez encontramos. En realidad la búsqueda está basada en el reconocimiento del objeto o sujeto. Es necesario saber de que color es, a qué huele, si es rugoso o suave, o si es posible provocar que de alguna manera haga un ruido o alguna señal para dar con él.
La vida es un juego de escondidillas interminable. Podemos elegir entre contar y buscar, o pasar largos ratos ocultos en la gaveta de la alacena para que no nos encuentren. Se puede elegir tambien estar en continua búsqueda. Así que los yucatecos no están tan perdidos. Buscar y encontrar son sinónimo.
2 comentarios:
Yo ahora estoy buscando algo, pero caigo en la cuenta de que soy totalmente responsable de haberlo perdido. Lo más frustrante es que se donde está, pero no me atrevo a luchar por recuperarlo. Y si, creí que buscaba algo desconocido.
Yo sigo confiando en San Cucufato y siempre aparece lo que se perdió. El único requisito para que funcione el conjuro es saber qué se está buscando.
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